Cultura minera y religiosa tras 450 años de historia en Soto Norte

Cada 16 de julio se rinde un homenaje a los hombres y mujeres que día a día se esfuerzan y trabajan en la actividad minera de nuestro país. Es importante resaltar que los mineros colombianos trabajan en operaciones a lo largo y ancho del país principalmente en carbón térmico y coque, ferroníquel, oro y esmeraldas.

El sector minero representa para algunas regiones de Colombia un renglón importante en su economía, no sólo por el nivel de empleos que genera, sino también por el volumen de regalías que se produce en beneficios de proyectos que impulsan el desarrollo de las comunidades como la educación, la innovación, acciones de protección del medio ambiente y el fortalecimiento de emprendimientos locales.

Manifiesta Alvaro Ponce Muriel en su libro ‘Riqueza Enterrada’ que, cualquiera que investigue sobre minería en Colombia, encontrará que en el país las actividades mineras y metalúrgicas se remontan a los nativos que usaron estas prácticas con efectos más culturales y religiosos.

La importancia de la actividad minera en Santander

En la actualidad, Santander es considerada la novena región minera de Colombia, por más de 450 años la minería ha permitido generar progreso y desarrollo en los municipios de California y Vetas de la provincia de Soto Norte; demostrando una vez más la pujanza santandereana en este tipo de labores.

La historia de Soto Norte ha estado cargada de minería ancestral, los primeros mineros fueron los indios chitareros y la primera empresa minera llegó en el año 1.820, con el visto bueno del libertador Simón Bolívar.

Actualmente los pequeños mineros de la zona le apuestan a la modernización de la minería tradicional y a la conservación de la tradición de esta cultura minera y religiosa, a través de la transferencia de creencias y prácticas ancestrales a las futuras generaciones. A continuación, destacamos las más significativas.

El pocito San Antonio- Patrono de los mineros.

El Santuario de San Antonio de Padua, el patrono de los mineros, se encuentra ubicado en la vereda la Baja a 20 minutos del municipio de California – Santander. Allí nació la devoción de un ciudadano español que se encargó de impulsar la fe en este santo.

Cuenta la tradición que allí los bajeños vieron cómo de la roca cercana al lugar donde estaba la imagen de San Antonio, brotaba un manantial de agua pura y cristalina. Hoy en día, constituye un santuario y lugar de peregrinación para la comunidad.

Conoce más de su historia aquí Historia Santuario San Antonio de Padua, California, Santander, junio 13 de 2013 – YouTube

José Celestino Mutis inició sus expediciones en Soto Norte

Por esta provincia han pasado reconocidos personajes de la historia colombiana. De acuerdo con el historiador santandereano Julio Acelas, el botánico e investigador José Celestino Mutis inició sus expediciones en Soto Norte, a donde llegó a finales del siglo XVIII. Y fue el propio Mutis quien llegó como minero a la región y se estableció en la montuosa baja, momento en el cual se dedicó a estudiar la vegetación de la zona y fue allí donde comenzó su gran obra de la Nueva Granada.