Voceros de Soto Norte se manifiestan acerca del futuro de la región

La minería y la agricultura, dos actividades milenarias en Soto Norte, están en jaque. Las razones: la delimitación del páramo de Santurbán y el bloqueo al proyecto minero más importante de la región.

Los cerca de 24.146 habitantes de esta provincia (conformada por seis municipios: California, Vetas, Suratá, Matanza, Tona y Charta) han dinamizado su economía gracias al cultivo de hortalizas y frutales, la ganadería, la minería ancestral y tradicional y las inversiones de cerca de siete empresas mineras tecnificadas que han hecho intentos fallidos de explotar oro en la región.

A pesar de ser una zona privilegiada por su variedad de pisos térmicos, su desarrollo ha estado frenado; según la comunidad, han sido víctimas del abandono estatal.

Por eso, decidieron crear el Consejo Territorial por la Defensa de Soto Norte, una asociación que reúne cerca de 45 organizaciones. “Nos preocupa el futuro de nuestra región, todos toman decisiones sin escucharnos y estamos ante el riesgo de desaparecer”, denuncia Leonor Álvarez, líder de Matanza.

Este Consejo tiene fundamentalmente dos objetivos. “Queremos defender nuestro territorio, aquí hemos estado desde hace más de 400 años y ahora nos quieren desplazar obligándonos a dejar las actividades que hemos desarrollado desde siempre”, enfatiza Holmes Valbuena, presidente de Firmes Santurbán, gerente del Clúster Empresarial y exalcalde de California.

La problemática comenzó en el 2012 cuando se inició la gestión para delimitar el Páramo de Santurbán, proceso que determinó, en el 2014, que el límite inferior de este ecosistema es de 3.100 m. s. n. m. Esto quiere decir que por encima de esta altura no están permitidas actividades como la minería y la agricultura, pilares económicos de Soto Norte.

Y aunque la delimitación se está haciendo nuevamente, gracias a una sentencia de la Corte Constitucional, las actividades que dinamizan el empleo y la economía en la provincia quedaron detenidas.

El caso más preocupante es en Vetas, en donde el 75,9 % del territorio está dentro de los límites actuales de Santurbán, y casi el 80 % de su población se dedica a la minería, lo cual tiene en una crisis de desempleo nunca antes vista a sus 1.319 habitantes.

“Nos han vulnerado los derechos y ha habido un efecto en nuestra población y es quitarle los sueños, los planes a la gente, porque no saben qué viene y llevamos así una década”, afirma Orlando Rodríguez, exalcalde de Vetas.

En California, un pueblo minero por tradición, se estaba proyectando uno de los desarrollos de minería a gran escala más grandes del país, que contemplaba inversión en infraestructura, educación y apoyo a los empresarios, entre otras. Detrás de este desarrollo está la Sociedad Minera de Santander (Minesa) empresa que se encontraba en fase de licenciamiento ambiental ante la Anla, proceso que fue archivado.

Esta situación tiene en vilo a la comunidad. Según Valbuena, en esta provincia no hay capacidad de generar empleos formales. “Los únicos procesos de contratación formal los hacen las alcaldías, eso suma entre los seis municipios cerca de 150 empleos para más de 30.000 habitantes, lo que el proyecto Minesa garantizaba era más de 6.000 empleos y una inversión que nunca se había hecho en la región”, afirma.

Para Edwin Blanco, presidente de Asojuntas Suratá, el problema radica en que el Estado no ha hecho inversiones reales en Soto Norte. “Las empresas mineras han hecho algunas inversiones, pero estamos abandonados en términos de infraestructura, salud y educación, ahora estamos ante la incertidumbre”, enfatiza.

Por ahora, y ante lo que ellos llaman “la incertidumbre total hacia el futuro”, reclaman ser escuchados por el Gobierno Nacional y por los entes de control. Exigen que sus opiniones y preocupaciones sean tenidas en cuenta para la nueva delimitación de Santurbán y que haya garantías para que no se deban desplazar de su territorio por falta de oportunidades.

“Necesitamos inversiones reales y con garantías, que sean concertadas con la ciudadanía de Soto Norte, aquí hace falta infraestructura, salud y educación, pero todo debe ser de común acuerdo con la ciudadanía”, concluyó Blanco.

Edwin Blanco, presidente Asojuntas Suratá.

«Nos preocupa lo que va a pasar respecto a la delimitación del páramo. Somos agropecuarios y mineros y queremos que nos escuchen antes de tomar las decisiones»

Leonor Álvarez, líder comunitaria Matanza.

«Siempre han sido las empresas mineras las que se han preocupado por mejorar la infraestructura, necesitamos proyectos que realmente jalonen la economía de la provincia»

Holmes Valbuena, exalcalde California.

«Nos han vulnerado todos los derechos y ha habido un efecto en nuestra población y es quitarle los sueños, los planes a la gente, porque no saben qué es lo que viene»

Orlando Rodríguez, exalcalde de Vetas.

Tomado de: Portafolio «¿Qué le espera a Soto Norte?, hablan voceros de la región» Portafolio (5 de noviembre del 2020) Recuperado de: https://www.portafolio.co/mas-contenido/que-desarrollo-le-espera-a-soto-norte-en-santander-546341