El nuevo reto de la presidenta de Cerrejón llega a 30 millones de toneladas

Tomado de Minería Panamericana

Al ser ratificada Claudia Bejarano como presidenta de Cerrejón, prácticamente se convirtió en la primera mujer en Latinoamérica en asumir el mando de un complejo minero y carbonífero de un gran tenor, el cual es considerado como una de las minas a cielo abierto más grandes del mundo.

Y aunque conoce al dedillo todos los detalles de esta operación extractiva a gran escala, ya que lleva más de 30 años de labores en la organización, tiene claro que por delante hay grandes desafíos que debe superar para mantener la operación de este complejo carbonífero a flote.

“Hoy, Cerrejón tiene grandes retos para garantizar su sostenibilidad y competitividad en un mercado en crisis. Si trabajamos unidos vamos a poder transformarnos para seguir apoyando a las comunidades, La Guajira y Colombia en su desarrollo”, afirmó la ratificada directiva.

Pero el panorama que tiene al frente no está nada fácil. De entrada tiene que lidiar con tres problemas que le han quitado el sueño a toda la administración del complejo carbonífero: la puja interna de accionistas, la estrechez en el flujo de caja y las demoras en la entrada en operación del tajo La Puente.

El primer escollo tiene que ver con el pulso entre los accionistas que operan la mina, que es prácticamente el espejo de la puja que estos vienen dirimiendo en los diferentes mercados del mineral en el mundo.

Mientras por un lado se encuentra Glencore, en la otra orilla están BHP Billiton y Anglo American. Y la principal razón del enfrentamiento entre las citadas compañías mineras tiene que ver precisamente con lo que las hace diferentes: precio y comercialización del carbón.

El segundo está relacionado con una caída en los precios del carbón en los mercados internacionales, que se acentuó más con la pandemia por la covid-19, y que le está pasando una cuenta de cobro alta a la administración del complejo minero, y que derivó en una estrechez de caja.

Y la tercera ecuación tiene que ver con la que será su tabla de salvación, la entrada en operación del proyecto del tajo La Puente, ya que además de llevar la producción de carbón a niveles de hace tres o cuatro años (más de 30 millones de toneladas/año), ganaría en ventas en el mercado internacional por la calidad del mineral.

Voceros del complejo minero le explicaron a Portafolio que este proyecto es relevante en la sostenibilidad de la compañía en las décadas por venir, y por tanto en la capacidad que ésta tiene de traducir su producción de carbón en riqueza social, mediante la generación de empleos, el pago de impuestos y regalías, y la realización de diferentes inversiones que apuntan al desarrollo de La Guajira.

Pero no solo los tres anteriores retos tiene que afrontar la nueva presidenta de Cerrejón, sino que tiene otro hueso duro de roer y que está sorteando actualmente, y es las negociación de los pliegos con los sindicatos.

Al respecto, las fuentes consultadas de Cerrejón, explicaron que la etapa de arreglo directo del proceso de negociación de una nueva Convención Colectiva de Trabajo con Sintracarbón inició el 14 de julio pasado y, de acuerdo con la ley colombiana, tiene una duración de 20 días calendario que finalizan el 2 de agosto y que podrían prorrogarse, de común acuerdo entre las partes, hasta por 20 días más.

“En el escenario actual del mercado del carbón y la emergencia generada por la covid-19, la administración y Sintracarbón debemos trabajar de forma responsable, con el objetivo de lograr un acuerdo que permita continuar brindando bienestar a los trabajadores, sus familias y La Guajira y que, al mismo tiempo, asegure la sostenibilidad y competitividad de la compañía”, resaltó uno de los voceros.

Otra variable en la ecuación, es la presión que Glencore está sintiendo en Europa para que salga de todos sus activos de carbón, lo que incluiría su participación en el complejo de Cerrejón.

Así, uno de los mayores exportadores del carbón en el mundo ha reducido en el último año el valor de su negocio en Colombia, que principalmente vende a Europa, en casi US$1.000 millones a medida que se adapta al difícil mercado que cada vez más se inclina por las tecnologías limpias.

Y su administración, con sede en Suiza, no descartaría suspender la extracción de carbón en el país en los próximos 15 años. “En el mercado del carbón del Atlántico no veo una gran recuperación”, dijo el responsable de la compañía, Ivan Glasenberg.

 

 

 

Tomado de: Portafolio «30 millones de toneladas, reto de la presidenta del Cerrejón» Portafolio (26 de Julio del 2020) Recuperado de: https://www.portafolio.co/economia/30-millones-de-toneladas-reto-de-la-presidenta-del-cerrejon-543038