Uno de los compromisos del Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2022, que sancionó hace una semana el presidente Iván Duque, es la aceleración del crecimiento potencial de la economía desde el 3,3 % que se estima actualmente a tasas mayores al 4 % o 5 %, y mantener dichas tasas para las próximas dos décadas.
En esta línea, el gobierno propone un plan de acción enfocado en la mejoría de la productividad de sectores claves de la economía como la minería, que fue uno de los de mayor crecimiento en la medición del Producto Interno Bruto (PIB), en el primer trimestre de este año, ubicándose en un 5,3 % según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
A su turno, la Agencia Nacional de Minería (ANM) precisa que el sector minero representa el 2 % del PIB, el 20 % de las exportaciones y el 13 % de la Inversión Extranjera Directa. Genera 350 mil empleos directos y casi un millón de puestos de trabajo indirectos. Y desde el año 2010, ha significado alrededor de 5.500 millones de dólares en regalías, recursos que se invierten en obras y beneficios para las regiones.
Carolina Rojas Hayes, viceministra de Minas, explica que el PND abarca acciones en tres frentes para consolidar esta actividad como una dinamizadora del desarrollo sostenible.
“El Plan contiene una serie de herramientas para que la autoridad minera resuelva trámites referentes a la legalización, pues se estima que hay unos 2.000 procesos pendientes de los cuales en Antioquia hay unos 400”, comenta la funcionaria en diálogo con EL COLOMBIANO.
Adicionalmente, señala que en cuanto a fiscalización y control de la minería, se establece la licencia ambiental temporal, dirigida a quienes buscan formalizarse.
“También hay un grupo de artículos que le permiten a la autoridad minera una mayor agilidad en aspectos técnicos como prórrogas, liquidación de contratos, y unas guías jurídicas para ser más eficientes”.
La intención es trabajar en una serie de iniciativas para seguir impulsando la reactivación del sector, generando empleo, oportunidades y beneficios para el país.
Los objetivos mineros del país al año 2022
Rojas menciona que entre las metas planteadas en el PND figura alcanzar una producción de 92 millones de toneladas de carbón por año, y de 42 toneladas de oro (1,35 millones de onzas troy) provenientes de áreas tituladas.
En 2018, según cifras de la ANM la extracción de carbón sumó 84,2 millones de toneladas y la de oro totalizó 35,5 toneladas (1,14 millones de onzas troy).
Para el primer trimestre de este año, la Agencia reporta que el carbón aumentó su producción 6,5 %, al pasar de 19,6 millones de toneladas en el primer trimestre de 2018, a 20,9 millones en el mismo periodo de este año.
Entre tanto, la producción de oro llegó a 8,9 toneladas (286.141 onzas) en el primer trimestre, con un incremento del 20 %, debido, principalmente, al buen momento de precios para este mineral (ver gráfico).
La viceministra de Minas añade que en formalización se busca que unos 800 pequeños mineros sean titulares de las áreas que explotan y que cumplan los estándares fijados.
En esa línea, la presidente de la ANM, Silvana Habib Daza, agrega que el PND contempla iniciativas como la habilitación para adelantar y culminar los trámites de formalización de minería tradicional.
“También se definen requisitos diferenciales para el otorgamiento de contratos especiales de concesión para la pequeña minería, entendiendo que no toda la minería es igual”, expresa la funcionaria, quien enfatiza en que las comunidades étnicas podrán acceder a los contratos mediante el cumplimiento de los requisitos diferenciales.
Igualmente, para los proyectos de pequeña minería se ofrecerá asistencia técnica, se evaluarán mecanismos de financiamiento para su adopción, y se incluirán herramientas que apoyen la implementación de la política de derechos humanos incluyendo el enfoque étnico y de género.
La perspectiva económica es favorable
Para los analistas económicos del Grupo Bancolombia, con los nuevos lineamientos la minería experimentaría un periodo de recuperación, gracias al cual se alinearía con su desempeño promedio histórico (un 3,8 %).
Al exponer las perspectivas de desempeño de este sector, los investigadores de la entidad financiera recuerdan que la explotación minera fue la actividad más afectada durante el periodo de desaceleración económica que propició el choque petrolero ocurrido entre 2014 y 2016.
No obstante, sugieren que las cifras más recientes son alentadoras, en la medida en que revelan un cambio de tendencia que puede perdurar durante este y los próximos años. Es necesario anotar que las estimaciones están soportadas en la recuperación asociada a la inversión en exploración y perforación petrolera.
Igualmente, advierten que las moderadas perspectivas del crecimiento mundial hacen suponer que en el mediano plazo los precios de los bienes básicos difícilmente se podrán mantener en sus niveles actuales. Además, es previsible que se ralentice la demanda externa por productos mineros de exportación, como el carbón y el ferroníquel.
Para estos expertos las presiones bajistas se alinean con la expectativa del gobierno de que el crecimiento de la minería en el próximo cuatrienio se ubicará en niveles ligeramente inferiores al del PIB, en el rango de 3,7 % en promedio.
Vigilando la utilización de las regalías
El PND resalta la importancia del sector minero-energético como aportante a las regalías, que el año pasado sumaron 6,9 billones de pesos, y por ello uno de los compromisos es fortalecer el seguimiento al uso de esos recursos.
“Se buscará involucrar a la mediana y pequeña minería en la implementación de estas buenas prácticas de transparencia. Para garantizar un mejor aporte al desarrollo territorial de los recursos de regalías, en especial en aquellas regiones que los generan, se impulsarán acciones que logren un mayor y más efectivo aprovechamiento de los dineros”, se lee en las Bases del PND.
Para el exministro de Minas, Amylkar Acosta, una novedad en la normatividad minera es la revisión del monto de las regalías que deben pagar los propietarios de yacimientos de recursos naturales no renovables, especialmente carbón, oro, plata y platino, en aquellos casos excepcionales en los cuales han sido objeto del reconocimiento de la propiedad privada sobre el subsuelo (ver Opinión).
Para poner en marcha las propuestas del PND, la viceministra de Minas reconoce que será necesario que el gobierno expida la reglamentación que requieren la formalización minera y de la licencia ambiental temporal.
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