Minería artesanal, el motor turístico de Santa Fe de Antioquia

Santa Fe de Antioquia, un pueblo de actividad aurífera y gran tradición joyera, quiere convertir en un nuevo motor turístico el ‘oro ético’ que extraen mineros artesanales y que termina en las manos de orfebres.

La iniciativa surgió tras acoger en julio pasado el simposio latinoamericano ‘En Construcción III’, un escenario que mostró a los asistentes los eslabones de la actividad acuífera de esta población, ubicada a menos de dos horas de Medellín. «Alrededor de esta actividad del oro queremos generar el diseño de un producto turístico como lo es una ruta del oro», contó la secretaria de Desarrollo Económico, Turismo y Medio Ambiente de Santa Fe de Antioquia, Dayana Giraldo. Precisó que esa ruta actualmente se encuentra en fase de diseño, pero «ya estamos haciendo algunos pilotos» para medir el impacto en los turistas.

El simposio, impulsado por la marca suiza Chopard, comprometida por su compromiso con el ‘oro ético’, además de reunir a expertos internacionales en joyería, fue para Santa Fe de Antioquia un «impulso» para continuar con un proceso de formalización de la minería artesanal de subsistencia.

Posteriormente, trabajarán con artesanos y joyeros, quienes transforman el oro y comercializan sus piezas desde el turismo, pero pueden «abrir otros canales» en un futuro próximo. «Queremos fortalecer cada uno de esos eslabones de la cadena formalizándolos para dar una mayor proyección. Incluso, una apertura también a una exportación de las joyas», señaló Giraldo.

Además, aseguró que también existe una la intención de postular como Patrimonio Cultural Inmaterial a la actividad joyera que hace parte de la identidad de este pueblo para garantizar así «acciones de protección».

Giraldo resaltó que esta actividad genera muchos empleos y por ello visualiza un tipo de «turismo comunitario» que sirve de «dinamización económica del territorio».

En esa creación de una ruta del oro, los barequeros (mineros artesanales) tendrán un rol estelar por la magia que envuelve esta práctica ancestral y empírica, sin vínculo con la minería ilegal y que no afecta al medioambiente.

Ruta del Oro

También existe una la intención de postular como Patrimonio Cultural Inmaterial a la actividad joyera que hace parte de la identidad de este pueblo para garantizar así «acciones de protección».

EFE

En las playas del río Cauca y en quebradas afluentes, Gustavo Alcaraz llega en las mañanas armado con una pala, una batea, un azadón y una zaranda en busca de «algunas chispitas» que representen su sustento en jornadas que no superan las ocho horas. «Es que esto es muy desgastante», explica mientras lava en su batea un poco del » oro virgen» que logró separar de la tierra. «Este proceso requiere de paciencia, talento y de ojos bien abiertos. No es solo lavar», agregó Alcaraz, uno de los tantos barequeros del municipio. Él describe su labor como «algo muy valorado y reconocido», y destacó su origen «puro y ancestral, sin maquinaria y ni químicos».

Gustavo Andrés Ceballos, encargado de la Unidad de Control Minero de Santa Fe de Antioquia, precisó que los barequeros no involucran elementos químicos y, además, representan un «patrimonio cultural» que necesitan fortalecer. «El oro que se extrae es un oro ético, sin químicos como el mercurio, sino con una técnica ancestral. Ellos separan el metal con un poquito del zumo de hojas de cedro y, en otra circunstancia, con un jabón biodegradable», comenta Ceballos.

Indicó que finalizarán próximamente un proceso de caracterización socio-económica de los barequeros, lo que permitirá la formalización de al menos 70 de ellos. Tras avanzar en la legalización de los barequeros, las autoridades de Santa Fe de Antioquia, que al año recibe más de 50.000 visitantes atraídos por su arquitectura colonial, frutas exóticas y lugares de veraneo, proyectan realizar lo mismo en los demás eslabones de la cadena productiva. 

Para ello, Ceballos reveló que firmarán un convenio con la Universidad Nacional de Colombia y la fundación ‘De la mano’, que pretende continuar con el fortalecimiento de la actividad aurífera, demostrar que la procedencia legal del mineral es «un hecho en el municipio» y encontrar espacios de comercialización internacional, acciones que van ligadas al propósito de salvaguardarlo como patrimonio.

Fuente: m.portafolio.co