Luego de varios años con el otorgamiento de títulos mineros frenado, básicamente por los fallos de la Corte Constitucional, las autoridades apuntan a estructurar un mecanismo similar al de la industria petrolera para que las firmas y personas naturales a las que se les otorguen áreas cuenten con el dinero de la inversión y la hagan.
Un proyecto de resolución de la Agencia Nacional de Minería (ANM), el cual será publicado en los próximos días, plantea los esquemas para determinar la capacidad económica que deberán demostrar los solicitantes, paso que debe armonizarse con las medidas para socializar los proyectos en las regiones.
La iniciativa se basa en las mejores cifras que tuvieron en el 2016 las 201 empresas que reportaron sus balances a la Superintendencia de Sociedades y en la necesidad de hacer más fuertes los criterios para demostrar la capacidad económica, en función de la clasificación de pequeña minería, mediana y a gran escala hecha por el Gobierno en el 2016.
De estas firmas, las 65 que reportaron sus balances bajo las normas internacionales de contabilidad subieron sus ganancias un 154 por ciento, tras tener ingresos por 14 billones de pesos ese año, mientras que las 136 que lo hicieron bajo la norma contable local vendieron ese año un 7,6 por ciento más que en el 2016, al totalizar ingresos por 1,5 billones de pesos.
Por ello se busca, además de armonizar esas normas, determinar el indicador de capital de trabajo para mejorar las condiciones de selección de los titulares mineros, buscando tener una minería bien hecha, reducir los requisitos según el tipo de solicitante y dejar claras las condiciones para los avales financieros.
La norma se aplicaría para los 871 títulos aprobados entre el 2015 y mayo del 2018, así como para solicitudes pendientes de tramitarse en ese período:e suman 6.611 peticiones a mayo.
Según Silvana Habib Daza, presidente de la ANM, si bien en minería suele haber empresas que hacen prospección y luego venden títulos, el principal objetivo es que cada titular, sea persona, grupo de personas o empresa, tenga asegurada la ejecución de la inversión mínima para la fase exploratoria. Se busca así frenar la especulación de títulos, que tiempo después de otorgados, no han invertido en la búsqueda de minerales.
Los requisitos
Si el solicitante es una persona natural del régimen simplificado, deberá adjuntar su declaración de renta (si declara), un certificado de ingresos firmado por un contador, tres extractos bancarios y el Registro Único Tributario (RUT).
Pero si es del régimen común, es decir que está obligado a tener contabilidad, además del RUT y de la declaración de renta tendrá que adjuntar sus estados financieros y el certificado de representación legal, pero si la ANM detecta inconsistencias y pide aclaraciones, pero estas no son dadas, el trámite se dará por desistido.
Luego de este filtro se evaluará la capacidad económica, que se medirá frente a la inversión que deba realizar cada uno de los proponentes según el estimativo presentado en el Programa Mínimo Exploratorio (PME). Si es una cesión de derechos o de áreas, la capacidad económica se medirá frente a la inversión futura que deba asumir el cesionario.
Y en función de si es pequeña minería (hasta 150 hectáreas), mediana minería (mayor a 150 hectáreas y menor a 5.000 hectáreas) y gran minería (mayor a 5.000 hectáreas y menor a 10.000 hectáreas), se establecerá un indicador de suficiencia financiera, tomando variables como los ingresos, la liquidez, nivel y capacidad de endeudamiento, pasivos, entre otros, y cada solicitante podrá pedir avales financieros y créditos para demostrar esta capacidad.
Incluso, según la ANM, los titulares podrán buscar socios que permitan garantizar los recursos para llevar a cabo el proyecto minero, pero si un solicitante tiene más de una propuesta de contrato, en el análisis se descuestan las obligaciones de inversión que tenga frente a las propuestas presentadas con anterioridad, así como las inversiones en títulos mineros vigentes.
Es decir que deberá tener capacidad financiera remanente para garantizar la realización de la exploración de cada una de las propuestas presentadas.
Una regla general del proceso, para medir este músculo, consiste en que, al restar del activo todos los pasivos, el patrimonio resultante debe ser mayor o igual a la inversión que tiene que llevar a cabo en el periodo exploratorio.
Solo el 3% de las solicitudes son de gran minería
La presidenta de la ANM, Silvana Habib, dijo que si bien las decisiones judiciales sobre concurrencia con las autoridades locales y las comunidades están haciendo más extenso el trámite de las solicitudes, “el interés minero no cesa, y la recepción de solicitudes de contratos de concesión minera ante la ANM se mantiene”.
De acuerdo con la funcionaria, del total de solicitudes por mineral a la fecha, un 45 por ciento corresponde a materiales para construcción.
Y en cuanto a su tamaño, el 54 por ciento de las solicitudes son para pequeña minería, y 42 por ciento, para mediana minería. Es decir que solo un 3 por ciento de las solicitudes de títulos mineros en Colombia corresponden a gran minería.
Fuente: portafolio.co
Ómar G. Ahumada Rojas
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