La Sociedad Minera de Santander espera que la Anla le brinde la licencia ambiental para iniciar la mina subterránea que conectará a California con Suratá
A 3.100 metros sobre el nivel del mar se encuentra en Páramo de Santurbán y abajo de este, a 2.640 metros, casi al mismo nivel que Bogotá, está el proyecto Soto Norte de la Sociedad Minera de Santander (Minesa), que espera la aprobación de la licencia por parte de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
Por el momento, la compañía cuenta solo con un túnel exploratorio de 150 metros de profundidad construido por AUX, la compañía brasileña que tenía antes el título minero adquirido por Minesa en 2015.
Este proyecto, que tendrá un duración estimada de 25 años, de los cuales los cuatro primeros años serán para construcción y adecuación de la infraestructura de la mina y los 21 restantes estarán dedicados a la producción, espera tener una extracción de nueve millones de toneladas de oro, que en término de oro puro o procesado puede representar casi 11 toneladas al año.
Alfonso Palacio Castilla, geólogo geomecánico de Minesa, aseguró, para tranquilidad de las comunidades, que no van a usar mercurio o cianuro en su operación minera, porque “solo vamos a sacar el concentrado de oro para venderlo a compañías internacionales que son las que se encargan de hacer ese proceso para obtener el oro puro”.
Sin embargo, en torno a este proyecto se han generado diversas disputas por una posible incidencia negativa en el Páramo.
Camilo Prieto, vocero Fundación Movimiento Ambientalista Colombiano, afirmó que “el límite del páramo y del proyecto de Minesa no puede obedecer solamente a unas variables geológicas, sino sociales. En Santurbán se supera el concepto de un mero debate, hay un conflicto socioambiental que ejemplifica la complejidad que deviene de un proyecto industrial que carece de licencia social. Nos demuestra la necesidad de superar los diálogos fragmentados para involucrarnos a fondo con las dinámicas de la gobernanza. No es un asunto de competencia exclusiva de la ingeniería”.
Sin embargo, al hablar de trabajo con los habitantes del municipio California en Santander, la compañía cuenta con una iniciativa de coexistencia minera en la que participan 160 mineros informales de la zona para que aprendan a hacer minería correctamente y puedan trabajar en un pedazo del título minero que tiene la empresa.
También cuentan con una alianza con el Sena para capacitar a los habitantes de este municipio en diversas materias, para que cuando la minera pueda iniciar su explotación de oro, todos puedan beneficiarse del trabajo que genera el proyecto. Minesa estima que podría aumentar el PIB de Santander en 16,39% y generar alrededor de 1.000 empleos directos y 4.000 indirectos.
Hay cerca de 380 mineros informales que operan en Soto Norte
Según un censo realizado por la compañía, se estima que en la zona hay cerca de 380 mineros que operan de manera informal, lo que significa que no tienen consciencia sobre el impacto que generan con sus operaciones en las que utilizan mercurio y cianuro para obtener el oro puro, que termina contaminando las fuentes hídricas que alimentan a diversos municipios y ciudades como Bucaramanga.}
Tomado de: La República
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