Vía libre al primer proyecto de infraestructura de quinta generación

En un momento difícil para la economía, con tantos sectores productivos paralizados y con la estrepitosa caída del precio del petróleo, es una muy buena noticia contar con nuevos proyectos de infraestructura que, además de mejorar la competitividad, contribuirán a la recuperación del empleo y de la demanda interna, una vez retorne la normalidad y se supere la crisis sanitaria.

En efecto, con el concepto favorable del Departamento Nacional de Planeación (DNP), el 3 de abril se dio vía libre al primer proyecto de infraestructura de quinta generación. Con esa aprobación, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) dio la largada al proceso de licitación para la construcción, mejoramiento y rehabilitación de 310 kilómetros de la vía que conectará Buga, en el Valle del Cauca, con Santander de Quilichao, en el Cauca, y que mejorará la movilidad del tráfico pesado en el pacífico colombiano.

El proyecto contempla además 12,6 km de nuevas segundas calzadas; 291,4 km de mejoramiento de corredores existentes; 2 intercambiadores a desnivel; 2 puentes vehiculares sobre el río Cauca; y 13 puentes peatonales. Se estima que la duración de las obras sea de cinco años y medio, incluido un año de preconstrucción. La concesión tendrá un periodo de 29 años y requerirá una inversión de $1,16 billones, Es el primero de doce de la primera ola 5G dentro de los cuales hay propuestas viales, fluviales, férreas y aeroportuarias.

Los proyectos viales 5G son de alto impacto social y económico como, por ejemplo, el acceso por el norte a Bogotá, la doble calzada completa entre Buga y Buenaventura, o la Troncal del Magdalena (el antiguo proyecto de Ruta del Sol II) que conecta con la Ruta del Sol III. Muy importante, de otro lado, la construcción del nuevo aeropuerto de Cartagena en Bayunca que, con el manejo previsto de más de cien mil pasajeros, llena una necesidad sentida de la región, atendida actualmente por el aeropuerto Rafael Núñez completamente desbordado, y que también va a ser ampliado.

En el diseño del programa 5G resaltan varios elementos. El programa le apuesta a la multimodalidad, en tanto facilita a los transportadores de carga llevar los productos por carretera, río o tren, con lo cual se reducen costos y tiempo en la operación. Además, se buscó que los proyectos fueran sostenibles financiera, ambiental y socialmente. La sostenibilidad financiera es clave, sobre todo si se tiene en cuenta la mala experiencia previa con la distribución de los riesgos entre el Estado y los concesionarios en rondas anteriores. Ahora se quiere que los proyectos viales se paguen esencialmente con el recaudo de peajes, que en todos tengan prioridad los temas ambientales y que en lo social se incluya un importante aporte a las comunidades, ya que un 0,5% del valor del contrato tendrá como destino obras sociales, así como un componente de trabajo directo de personas que residen en áreas de influencia de los proyectos.

Con esta nueva generación de proyectos de infraestructura se quieren superar las debilidades y problemas de corrupción que tuvieron programas anteriores, que llevaron a una crisis profunda y a grandes retrasos, a pesar de que hubo avances en varios aspectos. Solo queda esperar que a este proyecto se sumen prontamente los otros 11 de esta primera ola y contribuyan a la conectividad y la competitividad de la economía, al tiempo con los proyectos viales 4G, hoy suspendidos por la crisis sanitaria.

 

Tomado de: El Colombiano “Los nuevos proyectos de Infraestructura” El Colombiano (8 de Abril del 2020) Recuperado de: https://www.elcolombiano.com/opinion/editoriales/los-nuevos-proyectos-de-infraestructura-DD12772753