Informe de infraestructura 2010-2018

Pese a las dificultades, en los últimos años el país ha visto cómo diferentes regiones avanzan en materia de infraestructura.

El tema es tan importante, que diferentes voces llaman desde ya al gobierno de Iván Duque a mantener la línea de inversión y desarrollo que ha tenido el país en este campo.

Una de las voces más autorizadas en este renglón de la economía es la de Juan Martín Caicedo Ferrer, presidente de la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI). Para él, el gobierno de Iván Duque debe afrontar retos orientados a mantener la institucionalidad del sector, cuidar el programa de vías 4G, mantener el plan maestro 2015 – 2035, darles oportunidades y fortalecer las pymes de ingeniería, llevar la aplicación de los llamados pliegos tipo a todos los niveles.

¿Qué ha pasado en infraestructura desde el 2010 a hoy?

Han pasado grandes cosas. Por ejemplo, en el tema de dobles calzadas pasamos de 700 kilómetros a 2100 kilómetros. En red vial terciaria pasamos de 135.679 kilómetros a 142.284 km. Un dato de los más reveladores está relacionado con los pasajeros transportados vía aérea, pues se pasó de 20,1 millones a 59 millones. Esto se dio por las inversiones que hemos hecho en la modernización y ampliación de toda la red de aeropuertos.

Y en inversión…

En este tema, entre el 2010 y 2017, puedo decirle que en el modo carretero se han invertido $70,1 billones; en el sector aéreo $6,5 billones; en el fluvial, $300.000 millones; en lo ferroviario, $1,1 billones. En total han sido $82 billones invertidos. Esto es una revolución, esto no lo hace ningún país de Latinoamérica.

Las cifras muestran poca inversión en el tema ferroviario…

La cifra es baja en relación con la inversión en otros sectores, pero a pesar de ello esto resulta muy positivo porque lo que hemos hecho básicamente ha sido darle respuesta a la recuperación de la red férrea central entre La Dorada (Caldas) y Chiriguaná (César), es decir, entre el centro del país y la costa norte. Eso ya se logró. Claramente, seguimos con la frustración de que no hemos podido sacar adelante el Tren del Pacífico (Buenaventura) hacia el interior del país. Este es uno de los grandes retos del nuevo Gobierno.

¿Qué recibe el Gobierno Duque?

Recibe un sector robusto institucionalmente, el programa de carreteras más grande de América Latina y un sistema portuario y aeroportuario, cuya modernización ya está beneficiando a los usuarios.

¿Cómo está el país en el tema de vías terciarias?

Hemos apoyado la decisión de este Gobierno de invertir en vías terciarias, eso se aplaudió, pero tenemos reservas. La Cámara lo único que pide es que se adjudiquen de manera transparente, y es que si no hay pliegos tipo corremos el riesgo de que esas platas se pierdan en algunas regiones.

Pero quiero resaltar que antes de hablar de vías terciarias se deben priorizar las secundarias, porque todo lo que estamos haciendo con las 4G es construir la red primaria de carreteras, pero faltan muchas vías que son las que terminan conectando la red terciaria con la primaria.

Hablemos entonces de las secundarias…

Este Gobierno le deja al entrante estudios y diseños para unas vías secundarias que valen aproximadamente $10,5 billones para que se apliquen en 19 proyectos estratégicos. De manera que el próximo Gobierno debe buscar los recursos para entrar a contratarla.

Actualmente, hay un total de 32 vías secundarias identificadas en el Plan Maestro de Transporte, de estas 13 no cuentan aún con estudios y diseños por lo que esto debería contratarse a la mayor brevedad posible y estimamos que los estudios correspondientes tendrían un valor de $300.000 millones.

¿Cómo enfrentar la corrupción en este sector?

Eso depende fundamentalmente de la forma como se planteé el proceso licitatorio. Yo les pongo un ejemplo, se adjudicaron 30 contratos de concesiones de Cuarta Generación (4G) sin que hubiera un solo reclamo por parte de los perdedores. ¿Por qué? Porque utilizamos un mecanismo que facilita el hecho de que se acerquen al proceso licitatorio muchos oferentes. Si nos trasladamos a la obra pública, vemos que es muy importante la estandarización de los pliegos de condiciones para que no haya corrupción. Un ejemplo de ello es lo que ocurre en Invías, que durante los últimos años ha adjudicado, con total transparencia, contratos por cerca de $9 billones de pesos en tres programas.

Muestra acá mucha preocupación…

Sí, por una sencilla razón. En el pasado hemos tenido experiencias dolorosas con la autonomía de los municipios y departamentos para contratar. En muchos casos se corre el riesgo de que si no se utiliza la figura del pliego tipo, se pierdan los recursos. La Cámara, desde que nació hace 15 años, ha denunciado que en la mayor parte de los municipios y departamentos los procesos licitatorios conducen a únicos oferentes.

El túnel de la línea es el gran lunar…

Esta obra fue un proyecto mal pensado, mal planeado, mal estructurado y mal contratado, cosa que dijo la Cámara en su momento. Mal estructurada la licitación en una zona tan compleja, porque en ninguna parte del mundo se contrata a precio global fijo, el mecanismo que se utiliza para contratar en esas zonas geológicas tan complejas es el de precios unitarios.

¿Por qué no ha entrado a funcionar del todo la figura del pliego tipo si es tan urgente? 

Porque el Gobierno y el sector privado están avanzando en el proceso de reglamentación y eso se toma unos meses, esperamos a finales de julio haber culminado ese proceso, por ahora hay temor frente a la eventualidad de mal uso de los recursos de las vías terciarias de las que hablamos.

¿Qué retos debe afrontar el presidente electo Iván Duque en infraestructura?

El primero es mantener la institucionalidad que creamos en los últimos años para ser posible este milagro de la revolución de la infraestructura y además fortalecerla. Dos, cuidar el día a día del programa 4G de concesiones viales, eso es lo que comúnmente se conoce como la gestión contractual de los contratos durante su larga existencia. En este punto hemos planteado una consejería de alto nivel que colabore con la ANI en ese trabajo de gestión contractual.

¿Qué proponen como tercer reto?

Este Gobierno tiene un Plan Maestro en materia de obras 2015-2035. Esta no es una política de Gobierno, sino de Estado a 20 años. Se prevén inversiones por dos décadas por $200 billones, más o menos, $10 billones por año, esto si queremos poner al día la infraestructura colombiana.

Entonces lo que debe hacer el nuevo Presidente es darle continuidad y ejecutarlo. Allí se incluye la Carretera del siglo XXI, que conectará a Buenaventura con Puerto Carreño atravesando los departamentos de Valle del Cauca, Huila, Tolima, Vichada, Meta y cerca de 350 municipios.

Fuente: infraestructura.org.co